TESOROS DE LA BIBLIA Semana del 22 al 28 de septiembre 2025: Cómo entrenar a las siguientes generaciones en la fe

Descubre cómo los "Tesoros de la Biblia" de la semana del 22 al 28 de septiembre de 2025 equipan a las próximas generaciones. Fortalece la fe y los valores con nuestra guía de estudio bíblico. ¡Prepara a los jóvenes para un futuro espiritual sólido!

Discurso Preparado de TESOROS DE LA BIBLIA de esta Semana del 22 al 28 de Septiembre del 2025

Reflexiona con nosotros en la sección Tesoros de la Biblia de la semana del 22 al 28 de septiembre de 2025. Basados en Eclesiastés 1 y 2, aprenderemos la importancia de entrenar a las siguientes generaciones para que continúen la obra de Jehová con energía y fidelidad. Descubre consejos prácticos para delegar, motivar y fortalecer a los jóvenes en la congregación.

[Ponga el VIDEO Información sobre Eclesiastés].

Título: Sigamos entrenando a las siguientes generaciones

🎯 Introducción que despierte interés

Imaginemos por un momento que estamos en una carrera de relevos. Cada corredor corre con todas sus fuerzas, pero llega un momento en que debe pasar la estafeta al siguiente. Si no lo hace, el equipo pierde. La vida cristiana se parece mucho a esa carrera. Cada generación tiene la responsabilidad de entrenar y preparar a la siguiente para que continúe la obra de Jehová.

Eclesiastés 1:4 nos recuerda: “Una generación va y otra generación viene, pero la tierra permanece para siempre”. Esto nos enseña que, aunque nos encante la asignación que tenemos, no estaremos aquí para siempre. Por eso, necesitamos pensar en quién tomará el relevo después de nosotros.

📌 1. Cada generación tiene la responsabilidad de entrenar a la siguiente (Ecl. 1:4)

Desde los días de Adán, las generaciones envejecen y son sustituidas por otras. Hoy, el alcance de la obra de Jehová es mayor que nunca. Para avanzar, necesitamos nuevos métodos, y muchas veces eso implica usar tecnología.

Algunos hermanos mayores quizás sienten que es difícil mantenerse al día con tantos cambios (Lucas 5:39). Y aunque muchos lo logran, los jóvenes suelen tener más fuerzas y energías (Proverbios 20:29). Por eso, es una muestra de amor que los mayores preparen a los jóvenes para asumir más responsabilidades.

Leamos juntos Salmo 71:18: “Ahora que estoy viejo y canoso, oh Dios, no me abandones. Haz que yo hable de tu poder a la próxima generación, de tu fuerza a todos los que van a venir”.

Este texto nos recuerda que no importa la edad que tengamos, siempre podemos entrenar a otros.

👉 (Aquí destacamos la imagen que mostraste): Vemos a un hermano mayor y a un hermano más joven compartiendo juntos en una asignación. Esta escena refleja perfectamente lo que significa entrenar a la siguiente generación: no es perder protagonismo, es multiplicar fuerzas.

📌 2. Superar los temores al delegar

No siempre es fácil delegar. Algunos temen perder una posición que valoran mucho. Otros piensan que los jóvenes no harán las cosas tan bien. Y algunos creen que no tienen tiempo para capacitar.

Pero si lo pensamos, ¿qué es más importante: mantener una tarea para nosotros o asegurar que la obra de Jehová siga fuerte en el futuro? Cuando entrenamos a otros, no perdemos, ganamos.

Por otro lado, los jóvenes también tienen un papel. Deben evitar la impaciencia si no reciben de inmediato más responsabilidades. La madurez se demuestra con humildad y disposición para aprender.

📌 3. Entrenar da satisfacción a todos (Ecl. 2:24)

Eclesiastés 2:24 dice: “No hay nada mejor para el hombre que comer, beber y disfrutar de su duro trabajo. Esto también lo he visto: que viene de la mano del Dios verdadero”.

Cuando entrenamos a otros y les delegamos tareas, les damos la oportunidad de disfrutar trabajando duro para Jehová. Y nosotros también sentimos alegría al verlos crecer. No dejemos de capacitar a los más jóvenes por miedo a perder responsabilidades. Al contrario, pensemos en la satisfacción de verlos florecer en la congregación.

💖 Conclusión emotiva

Volvamos a la ilustración de la carrera de relevos. Si un corredor se aferra a la estafeta y no la suelta, el equipo pierde. Pero cuando la pasa con confianza, el equipo gana.

Así es en la congregación. Si entrenamos con amor a la siguiente generación, aseguramos que la obra de Jehová siga adelante con fuerza. Y cuando llegue el momento de que otros tomen el relevo, podremos sentir la satisfacción de haber cumplido con nuestra parte.

Sigamos, entonces, entrenando a las siguientes generaciones. Porque al hacerlo, no solo fortalecemos a los jóvenes, sino que también demostramos nuestra confianza en Jehová, el verdadero Entrenador de todos nosotros.

⏱️ Este discurso, leído con pausas naturales y énfasis, dura aproximadamente 7 minutos.