Discurso Preparado de TESOROS DE LA BIBLIA de esta Semana del 8 al 14 de Septiembre del 2025
Descubre cómo el consejo de Proverbios 30:8, 9 “No me des ni pobreza ni riqueza” nos enseña a confiar en Jehová y a llevar una vida sencilla y equilibrada. Este discurso preparado de Tesoros de la Biblia (8 al 14 de septiembre de 2025) muestra por qué la verdadera felicidad no depende del dinero, sino de nuestra amistad con Dios.
Título: No me des ni pobreza ni riqueza
Introducción
Imaginemos que alguien nos ofrece un deseo: pedir lo que queramos para toda la vida. ¿Qué pediríamos? 🤔 Quizás buena salud, dinero, éxito… Pero la Biblia nos muestra que un hombre sabio, Agur, pidió algo muy distinto. En Proverbios 30:8, 9 dijo: “No me des ni pobreza ni riqueza. Déjame devorar el alimento prescrito para mí”.
¿Por qué pidió algo tan sencillo? Porque entendía que la felicidad verdadera no depende de lo que tenemos, sino de lo que somos delante de Jehová.
1. Confiemos en Jehová, no en las riquezas (Pr 30:8, 9)
Todos sabemos que el dinero es útil, hasta cierto punto nos protege (Eclesiastés 7:12). Pero ¿es el dinero lo que da paz? El texto de Eclesiastés 5:12 dice que el trabajador, aunque coma poco, duerme tranquilo, mientras que el rico no logra descansar.
Agur entendió un gran peligro: la pobreza puede llevarnos a la desesperación y la riqueza puede hacernos olvidar a Jehová. Por eso pidió equilibrio.
Jesús lo confirmó en Mateo 6:24: “No pueden servir como esclavos a Dios y a las Riquezas”. Es imposible que el corazón esté dividido.
👉 Aquí podemos destacar la imagen adjunta: una mamá enseñando a su hija a ahorrar. Ellas no están pensando en ser ricas, sino en aprender a manejar lo necesario con sabiduría. Eso mismo quiere Jehová para nosotros.
2. La codicia nunca se sacia (Pr 30:15, 16)
El proverbio compara la codicia con la sanguijuela, con el fuego, con la tierra seca: nunca se llenan. Así son quienes buscan siempre más dinero, más lujos o más poder. Nunca se sienten satisfechos.
En cambio, quienes confiamos en Jehová aprendemos a valorar lo que tenemos y a vivir agradecidos. Filipenses 4:11-13 nos recuerda que podemos estar contentos en cualquier circunstancia, porque Jehová nos da fuerzas.
💡 Reflexión: ¿Queremos una vida persiguiendo cosas que nunca llenan, o preferimos la paz de confiar en Jehová?
3. La sabiduría bíblica nos protege del estrés y las deudas (Pr 30:24, 25)
El mundo promueve: “compra ahora, paga después”. Y eso solo trae ansiedad y deudas. La Biblia, en cambio, nos pone como ejemplo a la hormiga, que guarda en verano lo que necesitará en invierno (Pr 6:6-8).
Una regla práctica es: “Ahorra primero, compra después”. Puede parecer simple, pero evita problemas grandes. Y cuando enseñamos a nuestros hijos a hacerlo, les damos un regalo mejor que el dinero: les damos tranquilidad y confianza en Jehová.
Conclusión
El sabio Agur nos enseñó a pedir lo que de verdad necesitamos: “No me des ni pobreza ni riqueza”. Con esas palabras reconoció que la felicidad está en confiar en Jehová y vivir con lo necesario.
Hoy podemos preguntarnos: ¿qué me da más seguridad, el dinero o Jehová? Si confiamos en él, aunque tengamos poco, tendremos lo más valioso: paz, alegría y una amistad fuerte con nuestro Padre celestial. 🌿💚