📝Estudio de La Atalaya | Semana 10 al 16 de Noviembre de 2025 Que llame a los ancianos

Comentarios bien preparados del Estudio de La Atalaya | Semana del 10 al 16 de Noviembre de 2025 "Que llame a los ancianos"

Comentarios bien preparados del Estudio de La Atalaya | Semana del 10 al 16 de Noviembre de 2025

Este análisis del Estudio de La Atalaya de la semana del 10 al 16 de noviembre de 2025 profundiza en el tema bíblico “Que llame a los ancianos”, basado en Santiago 5:14-16. Exploramos por qué Jehová nos pide acudir a los ancianos cuando enfrentamos debilidad espiritual, cómo ellos reflejan el amor del “Pastor excelente” y qué beneficios recibimos al aceptar su ayuda. La explicación incluye razones prácticas, lecciones aplicables y recordatorios bíblicos que fortalecen la fe. También veremos qué sucede cuando escondemos nuestros errores y cómo la guía amorosa de los ancianos puede ayudarnos a recuperar la paz con Dios. Perfecto para quienes desean entender mejor el papel de los ancianos y cómo Jehová los usa para cuidar de su pueblo.

"Que llame a los ancianos"

1. ¿Cómo ha demostrado Jehová que quiere mucho a todas sus ovejas?

Respuesta directa: Jehová demuestra su amor porque compró a sus ovejas con la sangre de Jesús y designó a los ancianos para cuidarlas. Ellos, siguiendo a Cristo, las protegen con cariño y las animan frente a peligros espirituales.

Explicación: El hecho de que Jehová haya pagado un precio tan alto y luego delegara el cuidado del rebaño a hombres capacitados muestra cuánto valora a cada oveja. Él quiere que reciban apoyo tierno, constante y protector para mantenerse seguras en lo espiritual.

Idea secundaria (nosotros): Esto nos recuerda que nunca estamos solos. Jehová ha organizado una estructura amorosa donde los ancianos reflejan su cariño. Podemos acercarnos a ellos con confianza, sabiendo que su labor es protegernos como parte del inmenso amor de Dios.

2. ¿Por quiénes se interesa Jehová en especial? (Ezequiel 34:15, 16)

Respuesta directa: Jehová se interesa especialmente por las ovejas que sufren. Usa a los ancianos para ayudar a quienes atraviesan dolor espiritual y quiere que acudamos a ellos además de orar.

Explicación: Ezequiel muestra que Jehová busca, cura y fortalece a los heridos. Él no solo observa, sino que actúa mediante los “pastores y maestros” capacitados para levantar al que está abatido espiritualmente.

Idea secundaria (nosotros): Si sentimos heridas espirituales, no debemos aislarnos. Jehová nos invita a buscar apoyo en los ancianos. Al hacerlo, reconocemos su provisión amorosa y cooperamos con el modo en que él nos restaura.

3. ¿Por qué este artículo nos beneficiará a todos?

Respuesta directa: Nos beneficia porque explica cuándo acudir a los ancianos, por qué hacerlo y cómo nos ayudan. Incluso quienes están fuertes pueden valorar más la ayuda divina y prepararse para futuras dificultades.
 
Explicación: El análisis amplía nuestra comprensión del papel de los ancianos como instrumentos de Jehová. Esto nos equipa emocional y espiritualmente para reconocer cuándo necesitamos apoyo y cómo aprovecharlo.
 
Idea secundaria (nosotros): Aunque hoy nos sintamos fuertes, este conocimiento nos fortalece para mañana. Agradecemos que Jehová nos prepare antes de que lleguen las pruebas, ayudándonos a confiar más en la guía de los ancianos.

4. ¿Cómo sabemos que Santiago 5:14-16, 19, 20 se refiere a alguien enfermo en sentido espiritual?

Respuesta directa: El contexto muestra que la “enfermedad” es espiritual: Santiago no dice que llame a un médico, sino a los ancianos, y menciona el perdón de pecados como parte del proceso de sanación.

Explicación: La comparación entre enfermedad física y espiritual es intencional. Así como un médico escucha síntomas y da tratamiento, los ancianos aplican la Biblia para sanar y restaurar la relación con Jehová.

Idea secundaria (nosotros): Cuando sentimos síntomas espirituales, no debemos esperar. Igual que vamos al médico sin demora, buscamos la ayuda de los ancianos para evitar que la condición empeore y así mantenernos saludables ante Jehová.

5. ¿Cómo podemos revisar nuestro estado de salud espiritual?

Respuesta directa: Podemos evaluarlo comparando nuestro entusiasmo actual con el que teníamos al bautizarnos y examinando si seguimos disfrutando del estudio, las reuniones y la predicación sin que las cosas materiales hayan ocupado un lugar mayor.

Explicación: Santiago advierte que es fácil engañarnos. Analizar cambios en nuestras prioridades revela debilidades antes de que se conviertan en problemas graves. Si no podemos corregirlas solos, necesitamos ayuda de los ancianos.

Idea secundaria (nosotros): Este autoexamen sincero nos protege. Al detectar señales de alarma temprano, mostramos madurez. Y si vemos que no logramos recuperarnos, acudir a los ancianos demuestra que valoramos nuestra amistad con Jehová.

6. ¿Qué debe hacer alguien que ha cometido un pecado grave?

Respuesta directa: Debe hablar con los ancianos, pues un pecado grave requiere atención inmediata para reparar su relación con Jehová. El arrepentimiento verdadero incluye obras, y una de ellas es confesarlo.

Explicación: Jehová no perdona automáticamente los pecados graves. Él quiere ver cambios reales, y los ancianos ayudan a evaluar el arrepentimiento y a encaminar al hermano hacia la recuperación espiritual.

Idea secundaria (nosotros): Si fallamos de manera grave, no buscamos excusas ni evitamos el proceso. Acudir a los ancianos demuestra humildad y deseo de sanar. Es un paso importante para volver a sentir la paz que Jehová da.

7. ¿Quiénes necesitan también la ayuda de los ancianos?

Respuesta directa: También quienes luchan con malos deseos o se sienten débiles espiritualmente necesitan la ayuda de los ancianos, quienes escuchan con atención y ofrecen consejo práctico.

Explicación: Muchos hermanos arrastran hábitos del pasado que intensifican la lucha. Los ancianos brindan apoyo, aliento y recordatorios de que Jehová aprueba a quienes no ceden al deseo aunque sigan luchando.

Idea secundaria (nosotros): Si sentimos que estamos perdiendo fuerza, no debemos cargar solos. Pedir ayuda refleja que queremos mantener la aprobación de Jehová y reconocemos que necesitamos apoyo espiritual para resistir.

8. ¿Qué tipo de errores no es necesario contarles a los ancianos?

Respuesta directa: No es necesario contarles cada error. Si lastimamos a alguien o nos enojamos, podemos aplicar Mateo 5:23, 24 o buscar instrucciones bíblicas. Solo recurrimos a un anciano si no logramos resolverlo.

Explicación: Muchos asuntos pueden resolverse mediante el consejo bíblico personal. Pero si el problema persiste o afecta la paz, un anciano puede ayudar, tal como Pablo recomendó en Filipenses 4:2, 3.

Idea secundaria (nosotros): Este equilibrio nos ayuda a madurar. Primero intentamos aplicar la Biblia por nosotros mismos; si no funciona, con humildad buscamos a un anciano para lograr la paz que Jehová desea entre nosotros.

9. Aunque nos dé vergüenza hablar con los ancianos, ¿por qué debemos hacerlo?

Respuesta directa:

Debemos hacerlo porque Jehová nos los dio para fortalecernos espiritualmente. Acudir a ellos demuestra fe en que Dios nos ayudará si confesamos y abandonamos nuestros pecados.
Explicación:

La vergüenza puede paralizarnos, pero Proverbios 28:13 muestra que el perdón llega cuando dejamos la ocultación. Los ancianos son canales de Jehová para brindarnos apoyo y restauración.
Idea secundaria (nosotros):

Cuando vencemos la vergüenza, mostramos confianza en Jehová. Este acto de valentía abre la puerta a su misericordia y nos recuerda que no enfrentamos nuestros errores solos.

10. ¿Qué puede pasar si intentamos esconder nuestros pecados?

Respuesta directa: Si los ocultamos, nos perjudicamos espiritualmente, emocionalmente y hasta físicamente, tal como le ocurrió al rey David, quien sufrió por no confesarlos.

Explicación: Los pecados no tratados empeoran como lesiones sin cuidado. Jehová lo sabe y nos invita a “arreglar las cosas” buscando ayuda para detener el deterioro espiritual.

Idea secundaria (nosotros): Al ser honestos con nosotros mismos, evitamos ese desgaste. Pedir ayuda a tiempo muestra que valoramos la salud espiritual y confiamos en que Jehová puede restaurarnos.

11. ¿Qué más puede pasar cuando se esconden pecados graves?

Respuesta directa:  Ocultarlos puede dañar a otros, afectar la paz de la congregación y apagar el espíritu santo. Además, encubrirlos nos hace culpables.

Explicación: La congregación sufre cuando alguien oculta pecados graves. Jehová exige transparencia para que su espíritu fluya. Aconsejar a otros a hablar con los ancianos es una muestra de amor.

Idea secundaria (nosotros): Mantener limpia la congregación es responsabilidad de todos. Animar al hermano a decir la verdad refleja nuestro amor por Jehová y nuestra preocupación sincera por su bienestar espiritual.

12. ¿Cómo apoyan los ancianos a los que están débiles en sentido espiritual?

Respuesta directa: Los ancianos escuchan con atención, hacen preguntas sabias y no se precipitan en juzgar. Se esfuerzan por entender completamente antes de aconsejar.

Explicación: Ellos pastorean con paciencia. Saben que abrir el corazón puede costar y que algunos problemas no se resuelven rápido. Su objetivo es comprender y ayudar, no presionar ni aumentar la carga.

Idea secundaria (nosotros): Podemos facilitarles la labor siendo abiertos, aun si nos cuesta. Saber que los ancianos quieren nuestro bienestar nos anima a hablar con franqueza y dejar que Jehová nos guíe mediante ellos.

13. ¿Qué más harán los ancianos para ayudarnos?

Respuesta directa: Orarán por nosotros y aplicarán “aceite”, es decir, la verdad bíblica que calma, consuela y fortalece, ayudándonos a recuperar nuestra relación con Jehová.

Explicación: El “efecto poderoso” de sus oraciones y el uso hábil de la Biblia puede transformar nuestro ánimo. Por medio de ellos, Jehová nos dirige y nos devuelve a un camino seguro.

Idea secundaria (nosotros): Cuando aceptamos este consuelo bíblico, sentimos la cercanía de Jehová. Su palabra aplicada con amor nos da claridad, paz y la fuerza para continuar haciendo lo correcto.

14. ¿Cómo ayudan los ancianos a quien da “un paso en falso”?

Respuesta directa: Corrigen con espíritu apacible, como quien recoloca un hueso con cuidado para evitar más dolor. Lo hacen con humildad, conscientes de su propia imperfección.

Explicación: La corrección bíblica requiere empatía. La palabra “corregir” implica restaurar con delicadeza, no criticar. Los ancianos reflejan el amor de Jehová y siguen las normas justas con bondad.

Idea secundaria (nosotros): Saber que la corrección viene con cariño nos da confianza. Apreciamos la humildad de los ancianos y dejamos que Jehová nos reajuste para recuperar la salud espiritual sin temor.

15. ¿Qué podemos hacer si tenemos un problema?

Respuesta directa: Podemos acudir a cualquier anciano, pues todos están capacitados para aconsejar bíblicamente y guardar confidencialidad. No debemos buscar a quien solo diga lo que queremos oír.

Explicación: Jehová quiere que recibamos consejo sano, no palabras halagadoras. Los ancianos trabajan juntos, consultan entre ellos y se apoyan para dar orientación equilibrada basada en la Biblia.

Idea secundaria (nosotros): Confiar en la guía de los ancianos fortalece nuestra relación con Jehová. Al aceptar consejo aunque sea difícil, demostramos humildad y deseo sincero de actuar conforme a la enseñanza sana.

16. ¿Qué responsabilidad tenemos?

Respuesta directa: Los ancianos aconsejan, pero no deciden por nosotros. Cada uno debe demostrar amor a Jehová tomando decisiones que lo honren diariamente.

Explicación: La guía de los ancianos nos ayuda a ver los asuntos desde la perspectiva divina, pero nos corresponde decidir. Eso fortalece nuestra capacidad de discernimiento y madurez espiritual.

Idea secundaria (nosotros): Agradecemos que Jehová nos permita participar en nuestras decisiones. Al aplicar los consejos bíblicos, entrenamos nuestro discernimiento y mostramos que queremos agradarlo de corazón.

17. ¿A qué debemos estar decididos?

Respuesta directa: A acudir sin dudar a los ancianos cuando estemos débiles o espiritualmente enfermos, aprovechando el regalo amoroso que Jehová ha dado por medio de ellos.

Explicación: Jehová, mediante Jesús y los pastores que provee, cumple su promesa de alimentarnos y guiarnos. Ignorar esa ayuda sería desperdiciar una provisión diseñada para nuestro bienestar.

Idea secundaria (nosotros):Debemos estar decididos a no luchar solos. Aceptar la guía de los ancianos honra a Jehová y demuestra que queremos mantenernos fuertes como parte de su rebaño amado.

¿QUÉ CONTESTARÍAS?

1️⃣ ¿Cuándo debemos “llamar” a los ancianos?

Respuesta:
Debemos llamar a los ancianos cuando notamos que estamos débiles en sentido espiritual, cuando hemos cometido un pecado grave o cuando sentimos que estamos perdiendo la lucha contra malos deseos. También es sabio acudir a ellos antes de que nuestra relación con Jehová se deteriore, igual que buscamos ayuda médica antes de que un problema empeore.


2️⃣ ¿Por qué debemos “llamar” a los ancianos?

Respuesta:
Porque Jehová los ha puesto para cuidarnos con cariño y ayudarnos a recuperar la salud espiritual. Él usa a los ancianos para animarnos, corregirnos con espíritu apacible, darnos consejo bíblico y recordarnos su perdón. Al acudir a ellos demostramos humildad, fe y confianza en la guía que Jehová ha provisto.


3️⃣ ¿Cómo nos ayudan los ancianos?

Respuesta:
Nos ayudan escuchándonos con atención, dándonos consejos basados en la Biblia y orando por nosotros. Usan las Escrituras como un “aceite” que alivia, sana y fortalece. Con espíritu apacible nos ayudan a corregir pasos en falso, a recuperar la paz con Jehová y a seguir adelante con fuerzas renovadas.